Cáncer de pulmón

Según la  Sociedad Americana de Cáncer, el cáncer de pulmón es el segundo más común que afecta tanto a hombres y mujeres (además del cáncer de piel).

Alrededor del 14 % de todos los nuevos casos de cáncer son de pulmón.

Este tipo de cáncer se origina cuando las células de los pulmones se convierten en anormales y crecen de forma descontrolada.

Cuando estas células cancerosas se desarrollan, pueden forman un tumor y extenderse a otras áreas del cuerpo.

Existen dos tipos principales de cáncer de pulmón: el no microcítico y el microcítico.

El No Microcítico (células no pequeñas) es el tipo de cáncer de pulmón más común.

Se estima que del 80 % al 85 % de cánceres de pulmón son de células pequeñas.

El cáncer pulmonar Microcítico (células pequeñas) es la forma de cáncer en los pulmones más agresiva.

Este tipo de cáncer pulmonar evoluciona rápidamente y es más común en los hombres que en las mujeres.

Se estima que cerca del 15 % de todos los casos de cáncer pulmonar es de células pequeñas (CPCP).

Casi todos los casos de este tipo de cáncer son consecuencia del consumo de cigarrillo.

Síntomas del cáncer de pulmón

La mayoría de los cánceres de pulmón no causa ningún síntoma hasta que se han propagado demasiado, pero algunas personas con cáncer de pulmón en etapas tempranas presentan algunas señales, las más comunes son:

• Tos que no desaparece o que empeora.
• Tos con sangre o esputo (saliva o flema) del color del metal oxidado.
• Dolor en el pecho que a menudo empeora cuando se respira profundamente, tose o se ríe.
• Ronquera.
• Pérdida de peso y pérdida de apetito.
• Dificultad para respirar.
• Cansancio o debilidad.
• Infecciones como bronquitis y neumonía que no desaparecen o que siguen recurriendo.
• Nuevo silbido de pecho.

Causas del cáncer de pulmón

El  Instituto Nacional del Cáncer enumera los siguientes aumentan el riesgo de padecer cáncer de pulmón:

• • Fumar cigarrillos.
  • Exposición pasiva al humo de tabaco.
  • Antecedentes familiares.
  • Infección por VIH.
  • Factores de riesgo ambiental.

Diagnóstico del cáncer de pulmón

Estas son algunas de las pruebas que se pueden realizar para diagnosticar el cáncer pulmonar:

• Pruebas por imágenes: Una radiografía de los pulmones puede revelar un nódulo o una masa anormal; una tomografía computarizada puede revelar lesiones pequeñas en los pulmones que tal vez no se detecten en la radiografía.
• Citología de esputo: Al tener tos con producción de esputo, la observación del esputo con el microscopio a veces puede revelar la presencia de células pulmonares cancerosas.
• Muestra de tejido (biopsia): Procedimiento para el cual se extrae una muestra de células anormales.

Tratamiento del cáncer de pulmón

Los tratamientos varían, pero pueden incluir cirugía, radioterapia, quimioterapia, inmunoterapia y terapia farmacológica dirigida.

Cirugía

• Lobectomía pulmonar: Extracción quirúrgica de una parte (lóbulo) de un pulmón.
• Resección en cuña: Extracción quirúrgica de una pueza triangular de tejido del pulmón.
• Radiocirugía: Radioterapia que concentra energía de alta potencia en un área del cuerpo.
• Cirugía toracoscópica asistida por video: Cirugía que usa una pequeña cámara que se inserta en el pecho a través de una incisión.

Medicamentos

• Quimioterapia: Mata a la células que crecen o se multiplican muy rápido.
• Terapia dirigida: Ralentiza el crecimiento de la células cancerosas.
• Inmunoterapia: Reduce o cambia la respuesta inmunitaria normal para tratar enfermedades, en especial, el cáncer.

Prevención del cáncer de pulmón

Hay factores fundamentales para la prevención del cáncer de pulmón:

No fumar: es la mejor manera de prevenirlo.

Dejar de fumar: quienes han sido fumadores pueden reducir el riesgo de sufrir cáncer de pulmón dejando de fumar; aquellos que han recibido tratamiento por cáncer pulmonar, al dejar de fumar reducen el riesgo de nuevos cánceres.

Según el Instituto Nacional del Cáncer, en una persona que dejó el cigarrillo, la posibilidad de prevenir el cáncer de pulmón depende de la cantidad de años y cuánto fumó.

Si una persona no fumó durante 10 años, el riesgo de cáncer disminuye de 30 % a 50 %

Menor exposición a factores de riesgo en el lugar de trabajo: es necesario que los trabajadores no estén expuestos a sustancias cancerosas como amianto, arsénico, níquel y cromo en el lugar donde laboran para reducir el riesgo de padecer cáncer de pulmón.

Estadísticas del cáncer de pulmón por la Sociedad Americana de Cáncer

• Se diagnosticarán alrededor de 222,500 nuevos casos de cáncer de pulmón (116,990 hombres y 105,510 mujeres).
• Alrededor de 155,870 personas morirán a causa de este cáncer (84,590 hombres y 71,280 mujeres).
• Una de cada cuatro muertes por cáncer está relacionado al de pulmón.
• Cada año muere más gente por cáncer de pulmón que por cánceres de colon, seno y próstata combinados.
• Aproximadamente dos de cada tres personas que han sido diagnosticadas con cáncer de pulmón tienen de 65 años en adelante.

Viviendo con Cáncer de Pulmón

Al completar el tratamiento, los médicos aún querrán estar muy atentos al paciente. Es muy importante acudir a a todas las citas de seguimiento.

Casi todos los tratamientos contra el cáncer pueden causar efectos secundarios. Algunos de ellos pueden durar unos pocos días o semanas, pero otros pueden durar mucho tiempo.

Es posible que incluso algunos efectos secundarios no se presenten sino hasta años después de haber terminado el tratamiento.

Es importante que todas las personas que hayan padecido cáncer de pulmón informen a sus médicos acerca de cualquier nuevo problema o síntoma.