¿Cómo combatir el insomnio hormonal?
El insomnio hormonal afecta tanto a mujeres como a hombres, ya que cambios en estrógeno, progesterona, cortisol o testosterona pueden alterar el sueño.
El insomnio hormonal es un problema frecuente que puede afectar profundamente la calidad de vida.
Muchas personas lo sufren sin darse cuenta de su origen. Cambios en los niveles de estrógeno, progesterona y cortisol pueden alterar el ritmo del sueño, causando despertares nocturnos o dificultad para conciliar el sueño.
Este tipo de insomnio es común en mujeres durante la menstruación, el embarazo y la menopausia, pero también puede afectar a hombres y personas con altos niveles de estrés.
La buena noticia es que existen estrategias respaldadas por la ciencia para mejorar el descanso y equilibrar las hormonas de forma natural.
¿Por qué las hormonas afectan el sueño?
Las hormonas regulan muchas funciones del cuerpo, incluyendo el descanso. Algunos de los principales culpables del insomnio hormonal son:
- Progesterona baja: Es una hormona relajante. Su disminución en la menopausia y antes de la menstruación puede causar insomnio.
- Estrógenos en desequilibrio: Controlan la serotonina y la temperatura corporal. Su caída provoca despertares nocturnos y sudoración.
- Exceso de cortisol: El estrés eleva esta hormona, afectando el ritmo circadiano y retrasando el sueño.
- Resistencia a la insulina: Aumenta el azúcar en sangre, lo que interrumpe el descanso y genera fatiga.
Cómo combatir el insomnio hormonal
Para mejorar el sueño, es clave equilibrar las hormonas con estrategias efectivas:
- Controla la luz: Exponte al sol en la mañana y evita pantallas una hora antes de dormir.
- Aliméntate bien: Come magnesio (almendras, espinaca) y triptófano (pavo, plátano) para estimular la melatonina.
- Reduce el estrés: Prueba meditación, respiración profunda y yoga para bajar el cortisol.
- Mantén la temperatura adecuada: Dormir en un ambiente fresco mejora la calidad del sueño.
- Apoya tu cuerpo con suplementos: Melatonina, magnesio y ashwagandha ayudan a estabilizar las hormonas y mejorar el descanso.
El insomnio hormonal puede afectar tu bienestar, pero pequeños cambios hacen la diferencia.
Ajustar tu rutina, cuidar tu alimentación y manejar el estrés te ayudarán a dormir mejor y a darle a tu cuerpo el descanso que merece.
