Cómo manejar la fiebre infantil: qué hacer y cuándo preocuparse

Descubre cómo manejar la fiebre infantil de forma segura, qué medidas tomar en casa y cuándo es necesario acudir al médico.

La fiebre infantil es una de las causas más comunes de preocupación para los padres. Conocer cómo actuar ante la fiebre es esencial.

Este artículo ofrece consejos claros y prácticos sobre qué hacer y cuándo buscar atención médica.

¿Qué es la fiebre infantil y por qué ocurre?

La fiebre infantil se produce cuando la temperatura del cuerpo supera los 38 °C. Es una respuesta natural a infecciones o procesos inflamatorios.

En la mayoría de los casos, la fiebre ayuda al cuerpo a combatir patógenos y no es peligrosa por sí sola.

La fiebre es una señal de que el sistema inmunológico está funcionando para proteger al organismo.

No obstante, los padres deben saber diferenciar entre fiebre leve y fiebre que requiere atención.

Cómo manejar la fiebre en casa

Para controlar la fiebre infantil en casa, es importante mantener al niño hidratado. Ofrezca agua o líquidos con frecuencia.

Vista al niño con ropa ligera y mantenga el ambiente fresco. Evite las capas de ropa excesivas, ya que pueden aumentar la temperatura corporal.

Los medicamentos como el paracetamol o el ibuprofeno ayudan a reducir la fiebre. Consulte siempre con un médico antes de administrarlos.

Nunca use aspirina en niños, ya que puede causar el síndrome de Reye, una condición grave y potencialmente mortal.

Los baños tibios pueden ser útiles para ayudar a bajar la fiebre, pero evite usar agua fría o alcohol, ya que pueden causar escalofríos.

Cuándo preocuparse por la fiebre infantil

Debe preocuparse si la fiebre infantil supera los 39 °C o si persiste más de dos días.

Otros signos de alarma incluyen dificultad para respirar, erupciones en la piel, somnolencia excesiva o llanto inconsolable.

Preste atención si el niño presenta rigidez en el cuello o dolor de cabeza intenso.

En los menores de tres meses, cualquier fiebre es motivo de consulta médica inmediata. Los recién nacidos tienen un sistema inmune inmaduro, lo que puede requerir evaluación urgente.

Recuerde que la fiebre infantil suele ser inofensiva y es una parte del proceso natural de defensa.

Sin embargo, la observación cuidadosa y el conocimiento de los signos de alerta son esenciales. No dude en buscar atención médica si hay dudas o preocupaciones.

Con estos pasos, manejar la fiebre infantil puede ser menos estresante para los padres.

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