La cena también es importante
Una correcta alimentación eleva el bienestar en general y omitir la cena incrementa la acumulación de grasa en el cuerpo. Te decimos las opciones más saludables.
Es momento de olvidar el mito de “es mejor no hacer la cena”. Mantenerse en los extremos, nunca es una buena opción; ya sea no comer adecuadamente o hacerlo en exceso, traerán problemas para tu salud y bienestar.
Una persona que respeta las tres comidas al día, mantiene su peso, pues el sistema digestivo necesita períodos de reposo para prepararse y producir enzimas, que son las que ayudan a nuestro organismo a digerir y procesar los alimentos.
Cuando alguien distribuye su alimentación por períodos más largos, interrumpe este proceso e incrementa la acumulación de grasa en su cuerpo.
¿Por qué no saltarme la cena?
Existe un mito que sugiere no cenar para mantener o disminuir el peso. Sin embargo, la manera correcta para perder peso, es mantenerse en un déficit calórico; lo que significa gastar más calorías de las que se consume o disminuir la ingesta de estas.
Lo importante es lo que comes. El problema se da cuando te excedes con la cantidad de alimentos en la cena (o en cualquier momento). Como explicamos antes, el metabolismo disminuye su nivel de actividad en las últimas horas del día, por lo que debes darle trabajo que pueda realizar. No comer, o comer demasiado, se verá reflejado en una mala noche, lo que afectará tu salud en general.
Procura hacer una cena saludable y liviana; así evitarás la ansiedad al día siguiente, disminuyendo la posibilidad de consumir más alimentos de los que deberías y regalándole a tu cuerpo un buen descanso que te recargue de energía.
La nutricionista Priscilla Anderson del Grupo ABBM Nútrase Guatemala, aconseja tres opciones de cenas saludables basándose en una dieta de 2000 calorías diarias.
Opción 1: Sándwich de jamón y sopa de brócoli.
2 rodajas de pan integral.
1 rodaja de jamón de pavo o pollo.
1 rodaja de queso mozzarella.
½ aguacate.
Lechuga.
Tomate.
Taza y media de sopa de brócoli: ideal prepararla con agua y poca sal.
Opción 2: Atún con ensalada y galletas
1 paquete de galletas.
3 onzas de atún (aproximadamente ½ lata de atún en agua), preparadas con cebolla, apio y chile pimiento; aderezado con limón y pimienta.
Tres tazas de ensalada de pepino, acompañado de lechuga, maicitos, zanahoria rallada; aderezada con una cucharadita de aceite de oliva, limón y poca sal.
Opción 3: Sopa de tortilla hecha en casa.
Taza y media de sopa de tomate: prepárala con agua y poca sal.
3 cucharadas de pollo cocido desmenuzado.
2 tortillas de maíz en tiras, tostadas al horno o comal (lo importante es no usar aceite).
1 onza de queso panela en trocitos.
½ aguacate.
Pues bien, ahora que ya sabes la importancia que tiene la cena para llevar una adecuada alimentación, recuerda que antes de eliminar comidas de tu dieta es mejor que consultes con un especialista.