Dengue en niños: signos clave que no debes ignorar
La vigilancia constante, la atención médica oportuna y las medidas de prevención son fundamentales para proteger a los niños del dengue, una enfermedad potencialmente grave.
El dengue, una enfermedad transmitida por el mosquito Aedes aegypti, plantea serios riesgos para la salud de los niños.
A pesar de las campañas de prevención, los casos continúan en aumento. Lo que exige una mayor atención y cuidado en esta población vulnerable.
La vulnerabilidad de los niños
Los niños se encuentran entre los grupos más susceptibles a las complicaciones del dengue.
Detectar la enfermedad en ellos puede ser desafiante, ya que los síntomas pueden variar considerablemente.
Mientras algunos presentan síntomas similares a un resfriado común, otros pueden experimentar sangrados u otras complicaciones más graves.
Por lo tanto es importante observar cualquier signo de alarma y buscar atención médica de inmediato ante la sospecha de dengue en niños.
La fiebre persistente, especialmente en bebés, debe ser motivo de consulta sin demora.
Síntomas de alarma
Es crucial que los padres estén atentos a ciertos síntomas que podrían indicar complicaciones graves.
El dolor abdominal intenso, los vómitos persistentes, los sangrados de mucosas y la somnolencia son señales de alerta que requieren atención médica inmediata.
Cuidados y prevención
El reposo y la hidratación son fundamentales para la recuperación del paciente.
Además, es crucial administrar solo paracetamol para controlar la fiebre, ya que otros medicamentos pueden aumentar el riesgo de sangrado.
Las medidas de prevención, como el uso de repelentes y mosquiteros, son esenciales para evitar nuevas picaduras y la propagación del virus en la comunidad.
Duración y complicaciones
El dengue en niños sigue un curso similar al de los adultos. Se manifiesta una fase febril seguida de una fase crítica donde pueden aparecer complicaciones.
Aunque el dengue grave es poco común en niños, puede ocurrir y llevar a complicaciones potencialmente mortales, como el shock y el sangrado grave.
Transmisión y diagnóstico
El dengue se transmite a través de la picadura de mosquitos infectados y no se propaga de persona a persona.
Sin embargo, las mujeres embarazadas con dengue pueden transmitirlo a sus bebés durante el embarazo o el parto.
El diagnóstico se basa en la presencia de síntomas característicos y pruebas de laboratorio para detectar el virus en la sangre.
En resumen, el dengue en niños representa un desafío significativo para la salud pública.
La vigilancia constante, la atención médica oportuna y las medidas de prevención son fundamentales para proteger a los niños de esta enfermedad potencialmente grave.